Innovaciones que impulsan la línea de acabado moderna

Hace muchos años, el acero no inoxidable era el estándar para los equipos, pero presentaba muchas desventajas. Los productos químicos agresivos y la oxidación degradan el acero, lo que obliga a reemplazarlo periódicamente. Si bien el acero inoxidable estaba disponible y se utilizaba, su costo inicial era elevado y su funcionamiento era menos eficiente.

La carcasa de polipropileno para lavadoras de GAT, patentada en 1991, es el mismo material que se utiliza para fabricar los contenedores en los que se transportan los productos químicos, ya que no se degrada con el tiempo y es más rentable. Las carcasas de polipropileno no son higroscópicas, por lo que son ideales para entornos húmedos gracias a su resistencia a la incrustación. El polipropileno genera ahorros de energía, ya que requiere entre un 20 % y un 40 % menos de energía para funcionar gracias a su bajo coeficiente de transferencia de calor, lo que convierte a GAT en una de las primeras empresas en adoptar prácticas de acabado ecológico.

Además, el polipropileno permite una mejor iluminación en el entorno de trabajo gracias a su translucidez, lo que crea un entorno de trabajo más seguro y con mayor visibilidad. Las carcasas de polipropileno de GAT ofrecen soluciones únicas que benefician tanto a los propietarios y operadores como al técnico de mantenimiento de la planta.